La Rebelion (solo un trocito)

[corkran]

Bueno, como forma de obligarme a continuar, cuando tanto me cuesta y tan atascado estoy, pongo solo el trocito del comienzo de un relato que se llamara La Rebelion cuando algun dia este terminado.

Markus despertó sobresaltado por el sonido de las alarmas y por un momento no supo identificar donde se encontraba; ultimamente tenía la sensacion de que vivía dentro de una especie de burbuja de confusión constante, como cuando había bebido justo hasta por debajo de su límite y empezaba a encontrarse espeso. Eso y el cansancio acumulado de semanas y semanas de navegación. Cansaba mirar pantallas durante horas a la espera de tomar una decision instantánea, cansaban las horas de tedio, en una inactividad tensa, que rompía los nervios del más templado: repasar constantemente que todo estuviera correcto, recibir continuamente informes que podían resumirse en un “sigue sin pasar nada”escrutar el cielo y el horizonte intentando adivinar la amenaza o la oportunidad, antes de que fuese demasiado tarde.
Ahora recordaba los tiempos en que aquello era solo un juego y no podía ni siquiera concebirlos, como cuesta trabajo sentir en la piel el calor del verano, por más que se conozca y se sepa, cuando el invierno sopla en lo más crudo. No podía recordar, por mucho que lo intentase, cómo era jugar sin más, el sólo contra la máquina o en una partida multijugador con el resto de los antiguos compañeros. Le resultaba un escenario ajeno, incomprensible, ahora que tenía que lidiar con siete u ocho pantallas y una tripulacion real de hasta veinte personas de carne y hueso a las que darles ordenes y de los que cuidar y prestarles atencion. Ahora, cuando el cansancio lo derrumbaba a uno y casi no podía ni mantener los ojos abiertos, le resultaba irreal que alguna vez hubiera hecho algo parecido por pura diversión.
Era absolutamente inconcebible que en otro tiempo esto hubiera podido ser solo un juego inocente, ahora que lo que se jugaban eran sistemas enteros, la economía global y hasta vidas humanas reales en una guerra que nadie comprendía, pero que los estaba llevando a todos al borde del colapso.
Por cierto, una guerra que tenía la impresión de estar perdiendo por más que la prensa se esforzara en hacerles creer lo contrario.



en cuanto acabe con el puñetero convoy que estoy persiguiendo y que me tiene el seso comido (hay dos jodidos dds que estan empeñados en localizarme cada vez que me aproximo) en cuanto acabe, digo, me dedicare a ver si puedo acabarlo de una vez. pero es que es un poco enrevesado y no encuentro suficientes soluciones...ya veremos.