La frustración alemana después de la derrota y los duros términos del Tratado de Versalles, junto con la intranquilidad política y la inestabilidad social que afectaron crecientemente a la república de Weimar, tuvieron como resultado una radicalización del nacionalismo alemán. De esta forma se produjo el advenimiento al poder de Adolf Hitler, jefe del Partido Obrero Alemán Nacional Socialista (NSDAP), O partido nazi, de ideología totalitaria, ultranacionalista y antisemita.

Aqui podemos ver a un joven Adolf Hitler. Por aquel entonces, pocos podían prevér el horror que amenazaba Europa...
Después de hacerse otorgar plenos poderes en 1933, Hitler, que había asumido el título de Führer o caudillo del Tercer Reich, impulsó el rearme secreto de Alemania. Aprovechó la falta de decisión de las potencias europeas para oponerse activamente a sus designios y ordenó la ocupación militar de Renania en marzo de 1936, decisión que contravenía unilateralmente el Tratado de Versalles.
En ese mismo año, Benito Mussolini, el dictador fascista de Italia, que ya se había embarcado en una agresión a Abisinia (Etiopía), firmó con Hitler un acuerdo secreto germano-italiano que daría lugar al establecimiento del Eje Roma-Berlín. Al año siguiente, Italia se unió al pacto que Alemania y Japón habían firmado en 1936. Fue el llamado pacto tripartito.
Alemania e Italia intervinieron, en nombre del anticomunismo, en la guerra civil española iniciada en 1936.
La ofensiva alemana En marzo de 1938. Hitler envió tropas alemanas para ocupar Austria, que pronto fue incorporada por plebiscito al Tercer Reich (el Anschluss). En una hábil combinación de presiones internas y externas, logro la anexión o neutralización del territorio checoslovaco en marzo de 1939. En abril del mismo año, Italia se anexionó Albania. En agosto se firmó un pacto de no agresión entre Alemania y la Unión Soviética, en el que se establecía una cláusula secreta sobre la división de Polonia y el establecimiento de esferas de influencia soviéticas y alemanas en los estados bálticos y en Finlandia.

Foto de Arthur neville Chamberlain, Primer Ministro británico desde el 28 de Mayo de 1937 al 10 de Mayo de 1940. Junto con el resto de mandatarios europeos, fue incapaz de detener el auge del terror Nazi, que asolaría Europa, y cuyo germen ya estaba sembrado y arraigado.
CONTINUARÁ...