



Estaba a punto de terminar la IIGM y tanto americanos como soviéticos estaban ya dando caza a los científicos alemanes, criminales de guerra, y a todo elemento que pudiera servirles en la guerra fría que ya se avecinaba. Escrúpulos por una u otra parte se echaban por la borda.

Entre los personajes que optaron para irse a Argentina figuraba un curioso y singular personaje: el físico austriaco Dr. Ronald Richter, conocido también por "El sabio alemán".
Se doctoró en física en Praga, se mudó a Berlín y en los años de Hitler trabajó sin problemas. "Pero no era un nazi de corazón", se defendía.
Ya estaba casado con Ilse, una filóloga que hablaba 5 idiomas. Con el fin de la guerra se mudaron a París. Allí Richter recibió el llamado desde Argentina. Su"patrocinador" fue nada menos que el diseñador y piloto de pruebas Kurt Tang,*) del que hablaremos más tarde.
Ronald Richter fue capaz de escribirle esta carta a un amigo de Estocolmo: "Toda la familia, incluso Epsilon, se halla bien, a 800 metros de altura, junto a un lago de 300 metros de profundidad. Mónica se desarrolla muy bien y Epsilon pesa 5.000 gramos, y mi señora es muy feliz por todo eso". Epsilon era su gato siamés. Mónica, su hija de apenas unos días.


Épsilon (Ε ε) (literalmente e breve) es la quinta letra del alfabeto griego.
• En el sistema de numeración griega tiene un valor de 5.
• En matemáticas, ε suele designar a pequeñas cantidades, o cantidades que tienden hacia cero, en particular en el estudio de los límites o de la continuidad.
• En física, se usa para representar el valor de la constante dieléctrica.
• Los errores de todo tipo en el estudio de las ciencias en general.
• En autómatas y lenguajes formales, representa la palabra vacía.
Quizá fuera el nombre del gato el que irritara




El jefe del proyecto Huemul nació en 1909 en la ciudad de Falkenau. "Me encontré con que mi padre era técnico en minas y mi abuelo un economista. La primera palabra que aprendí fue máquina. Los libros técnicos y las máquinas fueron mis juguetes", escribió.
Argentina
La voz en off continúa: Llegamos ahora a Playa Bonita para conocer el mundo íntimo en
que vive el sabio argentino… Mediante varios planos medios la cámara enfoca a Richter y a su esposa en la casa en que viven mientras ella está mostrando en un álbum fotográfico familiar diversos acontecimientos de la vida del sabio.
Esta idea de acercar al público a la vida del físico es novedosa ya que la ciencia y sus
productos en general resultan inaccesibles para la gran mayoría de los ciudadanos. La
aproximación a la ciencia puede causar en el público una sensación de incapacidad para
entenderla, lo que es definido como el “efecto vitrina”38 por Philippe Roqueplo. También sus actores sociales -los científicos- son percibidos como lejanos y encerrados en una torre de marfil.
Así, en lugar de estar aislado de la sociedad, se ve a Richter en una escena familiar y doméstica,teniendo en brazos a su gato Epsilon …al que no dejaron entrar en EUA, y por cuya causa el Dr. Richter declinó la invitación de visitar ese país….
Al finalizar la guerra, los aliados buscaron obtener la colaboración de científicos alemanes.
Richter estaba interesado en ir a los EUA, pero de acuerdo con su propio relato, como no se le permitiera ingresar con su gato en ese país, decidió venir a la Argentina.
El noticiero transmite la imagen de un científico prestigioso, por el que estaba
interesada la primera potencia mundial, que optó y tomó la decisión de investigar en nuestro país.
Tanto en la historia de los EE.UU cómo en la de otros países hay hecho relevantes, de gran valor histórico, heroicidades y un largo etc. pero...también está la otra cara de la medalla, con toda una lista de gilipolleces.
El ver que los EE.UU. no tienen escrúpulos par dejar paso a criminales de guerra nazis, científicos y otros personajes, pero que no permiten a un científico entrar en el país por que éste quiere llevar a su adorado gato consigo, cueste lo que cueste, nos da una situación delirante por no decir kafkiana.
Ésta es la situación que pude vivir anteayer en un documental sobre el Cuarto Reich en Argentina, emitido por canal Historia, y que hoy, después de rebuscar un poco por la red vengo a transmitir aquí.


*) Sobre Kurt Tank
Después de finalizar la Segunda Guerra Mundial, el gobierno argentino había invitado a trabajar en la construcción de un jet argentino al Ing. Kurt Tank, uno de los mejores diseñadores de Alemania, responsable de la creación del famoso Focke-Wulf Fw 190.


Tank reúne un grupo de antiguos empleados de la Focke Wulf y llega a Córdoba para unirse al proyecto del futuro Pulqui II.
En los últimos meses de la guerra, Tank y su equipo habían trabajado en el diseño de un caza de segunda generación para la Luftwaffe, el Ta 183 Huckebein. Era un caza avanzado de alas en flecha que nunca se llegó a construir debido a la caída de Alemania.
Apenas llegado, Tank presenta a las autoridades del Instituto los planos del Ta 183, al mismo tiempo que el equipo argentino entregaba su anteproyecto. Como resultado de esta reunión se decide formar dos equipos trabajando en paralelo, uno alemán liderado por Kurt Tank, y uno argentino, liderado por el Ing. Norberto Morchio.
Una vez terminados ambos diseños, que resultaron ser muy similares, se sintetizan en un diseño final analizando cada diferencia y optando por la que presentara la menor dificultad de construcción. Puede verse que el avión no es simplemente un Ta 183 modificado, sino el producto de un desarrollo conjunto con los ingenieros argentinos en el que se aplican parte de los conceptos básicos del diseño alemán.
Los conceptos del Ta 183 no se utilizaron únicamente en el Pulqui II; porque sin que Kurt Tank lo supiera, simultáneamente se desarrollaba otro avión en la Unión Soviética a partir de una copia de los planos, obtenida por tropas de ese país durante su invasión a Alemania. Este era nada menos que el Lavochkin La-15 soviético, caza hermano del famoso MiG-15 del mismo origen.
Una vez resuelto el diseño, se comienza con la construcción de los prototipos. El primero es una versión sin motor, usada para comprobar la estabilidad del diseño. A continuación se fabrica el primer avión completo, que hace su primer vuelo el 16 de junio de 1950, pilotado por el Capitán Edmundo Osvaldo Weiss.
El 8 de febrero de 1951 se realiza la presentación pública del avión, en el Aeroparque Jorge Newbery de la ciudad de Buenos Aires. Estaban presentes el presidente de la nación y un nutrido grupo de funcionarios y diplomáticos, además de una enorme cantidad de público.
La crisis económica que se inicia en 1953 obliga a retrasar todos los programas militares, incluido el costoso Pulqui II. Después del derrocamiento del presidente Perón en 1955, el proyecto pierde el favor del gobierno y la mayoría de los técnicos alemanes se va del país. Kurt Tank emigra a trabajar en la industria aeronáutica de la India.
A pesar de todo el programa continúa y hacia 1959 se construye el quinto y último prototipo. Poco tiempo después, sin fondos ni apoyo del gobierno, el programa es cancelado definitivamente.
El único avión sobreviviente, el prototipo N° 5, se exhibe en el Museo Nacional de Aeronáutica en la base de Morón (provincia de Buenos Aires, Argentina).
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El Pulqui II era un monoplaza de ala alta, con una flecha hacia atrás de 40° y diedro negativo. La cola era en T, con los estabilizadores ubicados sobre el timón. La construcción era completamente metálica, y la cabina era presurizada con una cubierta tipo burbuja.

El motor elegido fue una turbina Rolls Royce Nene II con una potencia de 2267 kg. Un dato interesante es que el MiG 15 utilizaba una copia soviética de este mismo motor.
El avión tenía un desempeño muy bueno, siendo incluso superior al del F86 Sabre norteamericano. En una prueba de su capacidad, despegó de Córdoba con su carga máxima de combustible y municiones hacia la base aérea de Morón donde realizó dos pasadas de tiro y regresa a Córdoba, donde al aterrizar sufre un accidente debido a hipoxia del piloto, por un fallo del sistema de oxigeno. Ni el F86 Sabre ni el Mig-15 soviético tenían el alcance del Pulqui II.